Error crítico: La sede de la COP28 en Dubai envía el mensaje equivocado
En los próximos días, se llevará a cabo la sesión anual de la Conferencia de las Partes (COP) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) en Expo City, Dubai, en los Emiratos Árabes Unidos (EAU). Estas reuniones son esfuerzos globales para avanzar en el objetivo clave del Acuerdo de París de limitar el calentamiento global lo más posible a 1.5°C por encima de los niveles preindustriales. Las partes toman decisiones sobre cómo reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adaptarse a los impactos del cambio climático, sobre Pérdidas y Daños (que se refiere a la financiación para países vulnerables afectados por inundaciones, sequías y otros desastres climáticos), y sobre los medios para ayudar a los países a volver verdes sus economías y construir resiliencia al cambio climático (financiamiento, tecnología y capacitación).
La decisión de celebrar la COP28 en Dubai no ha estado libre de controversias, especialmente en cuanto al nombramiento del Presidente de la cumbre, Sultan Al Jaber, un ejecutivo petrolero, y al hecho de que los EAU son uno de los diez mayores productores de petróleo del mundo. Según el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), aproximadamente el 90% de las emisiones globales de CO2 provienen de los combustibles fósiles y la industria pesada. Contradiciendo las tendencias actuales hacia la reducción del uso de combustibles tradicionales, la empresa estatal de petróleo de los EAU (Adnoc) bombeó 2.7 millones de barriles de petróleo al día en 2021, con el objetivo de duplicar esa producción a cinco millones de barriles diarios para 2027. Dado que el mundo ya ha alcanzado un aumento de temperatura de 1.1°C, cualquier expansión adicional de la producción de combustibles fósiles socavaría el objetivo de temperatura del
Acuerdo de París.
Dada la responsabilidad de las empresas de combustibles fósiles en el cambio climático acelerado, se esperaría cierta cautela en cuanto a la nominación de Sultan Ahmed Al-Jaber como Presidente de la COP28, quien al mismo tiempo es el director ejecutivo de Adnoc y el presidente de la empresa estatal de energías renovables de los EAU, Masdar.
Al-Jaber recientemente le dijo a The Guardian: "Aunque no era el hombre obvio para el trabajo, estaba comprometido a hacer que la cumbre fuera un éxito. El enfoque es eliminar las emisiones de todo, sin importar de dónde provengan". Por lo tanto, debemos cuestionar las raíces de su discurso y la verdadera naturaleza de tales afirmaciones. Dada la posición central de los EAU en los mercados petroleros globales, el nombramiento de Al-Jaber ha suscitado serias preocupaciones sobre los esfuerzos de "lavado verde" por parte de los EAU y la creciente influencia de las empresas de combustibles fósiles en las deliberaciones de la COP. En esta cumbre, un importante lobista, con claros conflictos de interés, liderará las discusiones que legítimamente deberían estar en manos de las autoridades gubernamentales.
En la gobernanza ambiental global, la sociedad civil y sus organizaciones no gubernamentales (ONG) desempeñan un papel central al motivar y apoyar a los estados para gobernar los bienes comunes ambientales globales de manera más efectiva. Las ONgfh.jpgG tienen la mayor influencia en el resultado de las negociaciones climáticas cuando movilizan la presión pública en colaboración con los medios de comunicación. Durante esta COP, estas organizaciones están preocupadas de que su capacidad para tener un impacto significativo pueda verse comprometida debido al papel destacado que es probable que desempeñen las empresas de combustibles fósiles en la reunión
en Dubai. Esta desviación de enfoque puede desviar la atención del propósito real de la COP28, descuidando aspectos esenciales para abordar los desafíos del cambio climático.
A pesar de la importancia de las ONG en las negociaciones internacionales, esta cumbre estará rodeada de controversias sobre cómo los EAU restringen las operaciones de las ONG y reprimen las voces de la sociedad civil que son críticas con el gobierno. Las contradicciones con respecto al país anfitrión y la restricción de la libertad de expresión, la censura y la libertad de asociación, entre muchas otras, van en contra de todo lo que representa la CMNUCC. De hecho, el Informe sobre Prácticas de Derechos Humanos del Departamento de Estado de EE. UU. revela violaciones significativas de los derechos humanos, como arrestos y detenciones arbitrarias; prisioneros políticos; restricciones graves a la libertad en Internet; interferencias sustanciales con la libertad de reunión y asociación, incluidas leyes excesivamente restrictivas sobre la organización, financiamiento u operación de organizaciones no gubernamentales y organizaciones de la sociedad civil; restricciones serias e irrazonables a la participación política; restricciones gubernamentales serias o acoso a organizaciones nacionales e internacionales de derechos humanos; o leyes que criminalizan la conducta sexual consensuada entre adultos del mismo sexo, por mencionar algunas.
La estrategia de los EAU al utilizar su presidencia de la COP28 para resaltar su relevancia internacional y su estatus de potencia media en el escenario mundial, y para que el resto del mundo lo valide como anfitrión, les brinda la oportunidad de mostrar un liderazgo internacional
sin la rendición de cuentas que conlleva este papel. La representación del país como progresista, respetuoso de los derechos humanos y dispuesto a combatir el cambio climático, al mismo tiempo que expande su industria de combustibles fósiles, es sorprendente. La colaboración público-privada, los conflictos de interés evidentes y el doble papel del Sultán en sus posiciones complicarán y aumentarán la desconfianza en cuanto a los intereses de las delegaciones y sus posiciones en las negociaciones estatales.
Paula Collio Méndez
Investigadora externa del Centro Análisis de Políticas Públicas (CAPP)
Integrante del Grupo de Investigación en MA-OT-CC
Administradora Pública, con mención en Ciencia Política, U. de Chile. Postítulo en Política
Comercial (2020) y en "La Relación de Chile y sus vecinos del Norte: encuentros y desencuentros"
(2019). Estudiante del Master “International Relations” en The London School of Economics and
Political Science (LSE).
Las opiniones expresadas en esta columna reflejan la visión de su autora y no son necesariamente atribuibles al Centro de Análisis de Políticas Públicas.
